Relatos para un preso insumiso
Toribio que fue el primer insumiso que entró en Carabanchel, por no realizar la P.S.S. se negó en ocasiones a obedecer órdenes injustas y rápidamente fue trasladado a Navalcarnero. Cuando salió en tercer grado y nos contaba sus experiencias carcelarias , su cabeza y sus labios contaban una cosa pero sus ojos expresaban otra. Cuando entró por la puerta de la cárcel sus ojos brillaban, ahora estaban apagados y sin luz. En un libro de cuentos que le dedicó su amigo J. Barcia Magaz "RELATOS PARA UN PRESO INSUMISO. Ed. Madre Tierra. Nos dice desde la cárcel: " Cuando el aislamiento, la violencia, la soledad y el tiempo acechan esperando un atisbo de flaqueza, las cartas y los cuentos, es decir, el calor humano impreso en hojas de papel, se convierten en olas de abrazos y recuerdos que forman una muralla inquebrantable. Rompen el aislamiento abriendo espacios de luz que convierten el aire malsano en una brisa fresca y revitalizante.